Aclaración: este artículo no busca desmerecer el talento y trabajo de las miembros, mas realizar un análisis político de su lugar en el discurso musical actual y las estrategias de la Agencia YG Entertainment. 

Blackpink se ha convertido en uno de los nombres más resonantes de la escena musical actual. Son las protagonistas de los 5 videos de Youtube más vistos en sus primeras 24hs. El grupo con más suscriptores en un canal de Youtube, que generó una ganancia de U$D11.6 mill. Son las artistas coreanas con más seguidores en Instagram. Las únicas artistas femeninas coreanas en entrar al top 10 de Spotify Global. Son embajadoras de marcas de lujo como Celine, Dior, Chanel y YSL. Han vendido el equivalente a casi 13 millones de álbumes, sin contar los EP solistas de las miembros. Solo las ventas de su concierto online y CD físicos de su último álbum generaron ganancias de U$D18 mill este año. El grupo no sólo lidera las listas de popularidad en Corea del Sur, su país de origen; sino que ha logrado convertir su nombre en sinónimo de K-pop alrededor del mundo.

En este artículo intentaré explicar cómo esto ha sido posible y la clara intencionalidad detrás del hecho. Lo haré utilizando marcos teóricos elaborados por Laclau y Mouffe en sus publicaciones Discurso, el prefacio de Hegemonía y Estrategia Socialista (2da ed. en español) y ¿Por qué los significantes vacíos son importantes para la política?; comúnmente recurridos para analizar eventos como el populismo y las luchas socialistas del siglo XX. 

Tomando el título de la última obra, buscaré responder por qué los significantes vacíos son importantes para Blackpink; después de todo, la frase más recurrente en sus canciones es “Blackpink is the revolution”.

Los significantes vacíos y la hegemonía de Laclau

Ernesto Laclau y Chantal Mouffe son una pareja de académicos conocidos por sus contribuciones al paradigma crítico de las ciencias sociales. Su enfoque articula propuestas del psicoanálisis, el movimiento pos-estructuralista y teóricos marxistas clásicos como Gramsci. Una de sus contribuciones más célebres es su teorización sobre los significantes vacíos y la hegemonía

Desde finales del siglo XIX las corrientes críticas han teorizado que los significantes (sonidos, escritos, imágenes) y los significados (lo que buscan representar) no tienen una relación intrínseca, sino una social. Lejos de tener una correlación estricta, los sistemas de significación se rigen por un eterno juego de identificación y diferencia, donde se agrupa y relaciona lo que se considera “igual” y se separa y opone lo que se considera “diferente”. Por ejemplo, el ajedrez y el fútbol representan diferentes juegos (diferencia), pero ambos son deportes (iguales frente a los no-deportes) aunque no haya  intrínsecamente ninguna particularidad que los ate entre sí. Dentro de esta noción, el discurso es algo que trasciende la distinción entre lingüístico y no lingüístico, puesto que lo que une al significante y al significado es una conexión creada socialmente.

Así, los significantes flotantes proliferan en la sociedad y las fuerzas rivales compiten por fijar esos significantes a significados particulares. Por ejemplo, elección tras elección los partidos políticos buscan configurar qué significa “fortalecer la democracia”, buscando asociar el nombre de sus partidos y propuestas de campaña con ciertos valores (libertad, patria, igualdad, justicia social).

Una categoría particular del sistema de significación, es la de significante vacío, que es estrictamente un significante sin significado que es parte integral del sistema. Ellos se caracterizan por ser vaciados de carácter diferencial, es decir, carecer de toda particularidad y privilegiar la dimensión de equivalencia hasta el máximo de capacidad. De esta forma, ellos asumen el papel de representación total del sistema. 

Pero no todos los grupos tienen la misma posibilidad de convertirse en quien encarne esta función universal, debido a que el terreno de lo social está desnivelado. La política es la lucha por convertirse en esa particularidad representante. Para ilustrarlo, podemos tomar el ejemplo de la variedad de luchas, demandas y movilizaciones del siglo XX que se pusieron debajo del paraguas de Revolución. No es que tuvieran algo intrínsecamente en común, sino que percibían compartir un enemigo común (el régimen político de la época): la oposición fue lo que las unificó. Aquí se ven 2 procesos: uno inicial donde se estableció el carácter diferencial que separó a cada lucha de las demás; y uno posterior, dónde esas reivindicaciones se equipararon y agruparon por considerarse opuestas al sistema regente. Varias fuerzas políticas compitieron por presentar sus objetivos particulares como los objetivos holísticos que llenaran el vacío de la demanda (nuevo orden, igualdad, etc), y mostrarse como los gestores y representaciones de esos objetivos.

Esta relación por la que un contenido particular pasa a ser el significante de un sistema, se llama relación hegemónica. En otras palabras, la hegemonía es el resultado de la peculiar dialéctica entre la lógica de la diferencia y la lógica de la equivalencia donde una particularidad pasa a representar una universalidad que le trasciende.

Esto es posible porque los objetivos sociales son ontológicamente (y no solo fácticamente) inalcanzables. Libertad, comunismo, República, no son posibles constitutivamente: su valor y función es permanecer ausentes. Esto se debe a que no se puede demandar lo que se siente ya poseído; ni se puede desear algo que no se percibe como una falta. Hegemonizar es lograr llenar ese vacío: Un grupo se vuelve hegemónico cuando se presenta a amplios sectores sociales como realizador de los objetivos más amplios. Por ejemplo, el Partido Comunista Soviético, se mostró como los hombres nuevos de la dictadura del proletariado, necesarios para preparar el advenimiento del comunismo a comienzos del sXX en territorios de Europa Oriental y Asia. En simultáneo, otros grupos como el Partido Comunista Chino buscaban disputarle la hegemonía como sujeto del comunismo.

A su vez, la hegemonía es plenamente dependiente de las articulaciones políticas, puesto que para concebir una relación hegemónica y un sujeto hegemónico que le encarne son necesarios contextos muy particulares y precisos. Así, las transiciones hegemónicas (que una nueva relación y sujeto hegemónicos reemplacen al anterior) más que plausibles,son inevitables. 

¿Por qué los significantes vacíos son importantes para Blackpink?

En primer lugar, debo aclarar que el significante vacío que limita al sistema del KPOP es el world domination. Esto implica más que simplemente instalar la música en las radios globales, sino que involucra una forma de contar historias, presentar artistas, crear musicalidad, coreografía, presentación escénica, estética personal y de los grupos, particulares relaciones parasociales. Pero esto no significa que haya casillas a tickear y que el World Domination sea un significado: no es un objetivo a alcanzar, sino un significante vacío a hegemonizar.

La empresa de Blackpink (a partir de ahora BP), YG Entertainment, ha estado en batalla de instalar a un sujeto hegemónico del Kpop en occidente desde la primera década del milenio. En 2009 debutó su primer grupo femenino, 2EN1, al cual intentó instalar en el mercado angloparlante a través de acuerdos con marcas globales como Samsung y las heladerías Baskin Robbins, volviéndolas musas de diseñadores como Jeremy Scott (Adidas, Moschino) y asegurándoles presentaciones por EE.UU. de manera periódica. Aunque logró transformarse rápidamente en uno de los grupos musicales más famosos de Asia y un ícono de la música coreana, las condiciones de posibilidad no estaban dadas en el momento como para que un grupo surcoreano alcanzara el mainstream internacional (1).

Sin embargo, el estado del juego había cambiado. La ampliación del mercado digital (y sobre todo el de streaming) ha logrado establecer al modelo del entretenimiento coreano como uno de los más rentables del mundo; la inversión cruzada entre empresas de management de artistas y música de Asia y EE.UU. ha logrado acercar a ambos mercados musicales; y el éxito comercial de grupos como 2EN1 logró consolidar a YG como una de las agencias más poderosas y ricas de Corea del Sur (y una con los mejores contactos y experiencia dentro del mercado angloparlante).

En 2016, la compañía disolvió a 2EN1 y renombró al grupo que hace años tenía en formación bajo el título “Future 2EN1” y le bautizó BP. El fundador de YG,Yang Hyun-suk, expresó en su conferencia de prensa de presentación 

“Si me piden distinguir a BP de 2EN1, quiero decir que no intenté volverlos diferentes. Si me preguntan qué les diferencia de otros grupos, diré que no los creé con eso en mente. Intenté hacer la versión YG de un grupo femenino, como lo hice con 2EN1. Pero esta vez, quise que las chicas lucieran lindas también”.

De esta manera, podemos notar que de manera deliberada YG Entertainment busca que sus grupos femeninos alcancen el menor nivel diferencial posible. BP, desde su acto originario, no busca separarse ni de los demás grupos de su compañía ni de los grupos femeninos de kpop en general. Su oposición solo incluye “lo que no luzca lindo”. En términos laclau-mouffeanos, el enemigo político de BP es todo grupo kpop que luzca feo, lo que impide el World Domination. Así, si un grupo de kpop luce lindo “es como BP”; y si no lo hace, está en contra de BP y debe desaparecer y ser combatido para lograr el World Domination.

Esto se ha manifestado de varias maneras. La primera es que todo grupo kpop femenino que busque tener éxito, es decir, que luche por la transición hegemónica, se enfrente a una constante comparación con BP. Como el grupo busca despegarse de características específicas que marquen su particularidad, casi cualquier aspecto puede ser considerado un “rasgo BP”: ¿Tienen contratos con empresas de moda internacionales? Como BP ¿Usan colores contrastantes en sus videos? Como BP ¿Han roto récords internacionales? Como BP ¿Una miembro usa flequillo? Como BP. Si por el contrario, no poseen alguno de esos atributos “no le llegan ni a los talones de BP”. Esta estrategia política de lucha por la hegemonía se traduce no solo en comparaciones imposibles, sino en un fandom (club de fans organizado) estimulado para ser extremadamente feroz y activo en su labor de mantener el status del grupo.

En segundo lugar, en producciones musicales y visuales escasas, abstractas, rígidamente preparadas y genéricas: BP tiene que ser un espacio donde realizar un desplazamiento (en términos psicoanalíticos), un lienzo en blanco donde proyectar.  Es virtualmente imposible encontrar material de las integrantes que no haya sido aprobado por la empresa, incluso las entrevistas y apariciones en programas de música son limitadas. Casi todas sus canciones son producidas por el mismo productor de su debut (Teddy Park), siguen la misma estructura musical y sus videos musicales dirigidos por el mismo director (Seo Hyun-seung). El material es tan escaso que en 5 años de carrera solo han lanzado 22 canciones originales (2). Sus álbumes (Blackpink, Square 1, Square 2, Square Up y The Album), tours y recitales (Arena Tour, In Your Area Tour y The Show) y documentales (Light Up the Sky y The Movie) tienen nombres tan intencionalmente reductivos que simplemente se les denomina como lo que son: El álbum, el show, la película. Sus producciones en solitario han sido criticadas por no presentar facetas distintivas de la personalidad o propuesta artística individual de las miembros, y a tono con la discografía grupal, los mismos se titulan “Solo” (porque fue el primer solo de BP, por Jennie), R (porque pertenece a la miembro Rosé) y LALISA (el nombre civil de la miembro Lisa).

Y todo esto, que ha convertido a BP en el sujeto hegemónico de la world domination del kpop, es lo que le enfrenta al ineludible desafío de todo sujeto hegemónico. En palabras de Laclau en “¿Por qué los significantes vacíos…” : 

“Cuando un grupo pasa a ser el significante de todos los objetivos sociales, también se convierte en superficie de inscripción y medio de expresión de todas las luchas, hasta que el significante se vacía y desdibuja su conexión con el contenido concreto con el que estaba originariamente asociado. De ese modo, como resultado de su éxito, la operación hegemónica tiende a atenuar sus vínculos con la fuerza que había sido originalmente su promotor y beneficiario. Y así, la hegemonía se vuelve inestable, permitiendo que otros grupos entren en disputa por la posición de sujeto hegemónico”

Cuanto más se extienda la cadena de equivalencias, menor será la capacidad de cada lucha concreta de permanecer encerrada en su identidad diferencial. Es decir, cuanto más hegemónico, más difícil resulta retener distintividad: ese algo que les singulariza se hace cada vez más evidentemente presente en todos los grupos. Al haber llegado tan lejos en la cadena equivalencial, lo que singulariza a BP es su alcance y visibilidad casi imparable: de allí que su slogan sea “Blackpink in your area”. Pero su exitosa labor de popularización del kpop femenino ha pavimentado el camino para que sea más sencillo para otros grupos llegar a esas áreas…y conquistarlas.

Hoy las condiciones de posibilidad han variado nuevamente; y nuevos actores entran a escena día a día. Nuevos grupos femeninos de la cuarta generación del kpop (2019 en adelante, aprox) están alcanzando rápidamente metas que a grupos anteriores les costó años de trabajo alcanzar: acuerdos con marcas de lujo, presentarse en shows y alcanzar el puesto #1 en las listas de todo el mundo, conformar un fandom internacional de proporciones gigantescas. Pero no es solo que puedan lograr lo mismo que el sujeto hegemónico, sino que responden a nuevas exigencias que BP parece no poder cubrir: tener relaciones parasociales más cercanas, insertarse en el mundo de la IA y los e-games, apelar a nuevos mercados, entre otros.

Estamos en tiempos de transición hegemónica, y próximamente un nuevo sujeto hegemónico ocupará el asiento del World Domination del kpop femenino, un trono que BP supo decorar de oro y llevar a todos los rincones del mundo durante los últimos 5 años.

NOTAS DE LA AUTORA

(1). El objetivo de World Domination ha sido perseguido por las compañías coreanas desde comienzos del milenio. SM Entertainment fue el pionero a comienzos del milenio con actos como BOA y SuperJunior; que lograron volver a Corea uno de los proveedores de música más importantes de Asia. Posteriormente, JYP Entertainment concibió grupos femeninos pensados desde su nacimiento como grupos internacionales: Miss A (literalmente Señorita Asia) y Wonder Girls (inspirado en los grupos motown; a quienes intentó instalar en EE.UU. de manera activa).

(2). no cuento covers, remixes, versiones en japonés, acústicas o similares de temas originales ni colaboraciones que no estén presentes en su discografía oficial.

Una respuesta a “¿Por qué los significantes vacíos son importantes para Blackpink?”

  1. […] (fundada por uno de los miembros de Seo Taiji & Boys. Podés saber más de ella en mi artículo ¿POR QUÉ LOS SIGNIFICANTES VACÍOS SON IMPORTANTES PARA BLACKPINK?) y JYP Entertainment (Twice, ITZY, Stray Kids, etc etc […]

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