Todos y todas conocen a alguien celíaco o alérgico a la proteína del gluten. Si bien, es todo un desafío entender y cuidar a quienes padecen la enfermedad celíaca, desde lo individual y lo colectivo se trata de aportar cada vez más oportunidades.
Impensable salir a comer con amigos o compartir, tiempo atras, cumpleaños o celebraciones con personas que consumen habitualmente gluten. Hoy las industrias han avanzado en producciones de mayor calidad y variedad para las personas celiacas.
La concientización y visibilización ha sido fundamental para el abordaje de este padecimiento. Tanto es así, que hoy llamarlo ‘enfermedad’ o ‘padecimiento’ queda totalmente obsoleto y se opta por reconocer la celiaquía como una condición en la alimentación de por vida.
Segun los relevamientos estadísticos y estudios hechos por Gómez y Col entre 1998 y 2000 en La Plata el 1% de la población es celíaca. Otros estudios llevados a cabo por el Ministerio de Salud de la Nación (2010) arrojó una prevalencia del 1,26% de la población.
¿De que se trata la celiaquía y por qué debería ser de importancia para la ciudadanía?
La celiaquía es un trastorno digestivo que daña el intestino delgado y altera la absorción de las vitaminas y minerales (entre otros nutrientes) que contienen los alimentos. Las personas con celiaquía no pueden consumir la proteína ‘gluten’ contenida en cereales como el Trigo, Avena, Centeno y Cebada (T.A.C.C). Una de cada 100 personas posee esta condición y a lo largo de los años se ha reclamado, por parte de la sociedad civil, que se genere legislación y protección para las personas que, en el caso de estar expuestos a los cereales ya nombrados, pueden sufrir desnutrición, entre otras patologías. La Asociación Celíaca Argentina y Celiacos Buenos Aires han luchado y pujado para las leyes de protección. ¿Por qué?
- Las empresas productoras de productos sin TACC han inflado los precios de los productos hasta un 200% más que los productos tradicionales con gluten. Esto genera que no todos puedan cuidar su salud ya que la vida de un celíaco es muy costosa. El Fundador de la Organización Celíacos Buenos Aires, Fernando Bertani, acusó a las empresas y locales que ofrecen alimentos sin TACC de oportunistas. Los precios son alto ya que no pueden elegir otra opción.
- Restaurantes y locales de comida no brindan opciones sin TACC, por lo que un celíaco queda totalmente privado de ir a tomar un café o salir a comer.
- Los medicamentos (ibuprofeno, aspirinas, antibióticos, jarabes) poseen TACC o no poseen leyenda ‘Libre de gluten’.
A partir de estos reclamos la Ley Celiaca fue aprobada en 2009 (Ley 26.588) y modificada en 2015 (Ley 27.196). La ley establece la obligatoriedad del logo Sin TACC (la espiga de trigo tachada) y la leyenda ‘Libre de gluten’ visible en los envoltorios de alimentos aptos y de todos los medicamentos que garanticen la inexistencia de contaminación con gluten. También establece condiciones para las obras sociales en cuanto a la ayuda con la compra de los alimentos, seguimiento de tratamientos, estudios, etc. En el caso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, sigue la discusión. La adhesión de los Restaurantes y locales de comidas es voluntaria ¿debería ser obligatoria? Sergio Abrevaya, legislador de la legislatura porteña y creador de la Ley sigue peleando por una mayor reglamentación de la Ley.
La ley está, pero ¿quién la aplica? El año pasado el Diputado Cabandié ha expresado su interés por avanzar con la reglamentación y la comunidad celíaca confía en que se va a avanzar en el asunto.
Mientras tanto, nos preguntamos por los productores de materias primas libres de gluten y la certificación que brinda ANMAT para declarar los productos aptos. ¿Qué característica distintiva encarece un 200% la producción de harina de arroz, o de mandioca, o de maíz?
Los molinos harineros en su mayoría producen harina de trigo, por lo que otras harinas producidas en el mismo lugar quedarían totalmente contaminadas y no aptas para el consumo celíaco. Esto, no solo implica un lugar de producción separado, sino que también hay que pensar en los procesos burocráticos y los obstáculos impositivos para obtener la certificación del producto y, por lo tanto, acceder al logo en los en los envases. Entonces ¿el problema es de las empresas? De las empresas que no son auditadas, controladas en su fijación de precios por el Estado. En cuestiones bromatológicas, los cuidados son estrictos para evitar la contaminación, pero ¿No se debería flexibilizar el proceso burocrático para la obtención del logo sin TACC? ¿Deberían pagar las empresas para obtenerlo?
En cuanto a los restaurantes y locales de comidas, no hay tregua. La solución para que posean opciones sin TACC, es la obligatoriedad.
¿Está moda ser celiaco?
Absolutamente no. Ser celíaco no es una elección. Según expertos en transgénicos, el trigo ha sido modificado para que contenga más proteína de gluten que antes para que en menor cantidad, aporte más nutrientes a la población. Las personas que se encontraban expuestas a determinada cantidad de gluten, no sufrían síntomas o efectos del mismo. Con esta gran modificación muchos celíacos asintomáticos o que no lo sabían empezaron a concurrir a especialistas y confirmaron su celiaquía.
Es Salud Pública
La Ley de Celiaquía y el Boletín Oficial han explicitado que la celiaquía es de interés nacional. Por lo tanto, en torno a lo científico, se ha determinado que habrá fondos especiales para la detección , investigación y avance de la mejora de la calidad de vida de las personas con celiaquía.
Es importante que, debido a las complejidades que arrastra una intoxicación con gluten, los programas de capacitación para gastronómicos o personal que trabaja con alimentos, sean totalmente obligatoria para evitar inconvenientes. Queda en manos de los representantes exigir a las empresas que cumplan con la legislación existente, en primer lugar. Luego, se deberían poner en marcha la concientización a nivel nacional e institucional para garantizar la inclusión de las personas celiacas en cualquier ámbito de la vida.