El próximo 28 de noviembre tendrán lugar las elecciones generales en Honduras, país centroamericano de 9.9 millones de habitantes. De ellos, unos 5.1 millones están habilitados para votar y elegir al próximo mandatario, en unos comicios donde también se renovarán las 128 bancas legislativas. Pero a poco más de una semana de la renovación de autoridades, se han registrado una serie de hechos de violencia que han alertado a la comunidad internacional y podrían complicar el proceso electoral.

Uno de los hechos trascendentales fue el asesinato del que era el alcalde y candidato a su quinta reelección en el municipio de Cantarranas, Francisco Gaitán, miembro del Partido Liberal, quien se encontraba participando de una concentración política. De acuerdo con la información que trascendió y que compartió la Policía Nacional, el candidato recibió varios disparos. Por el Partido Liberal también este lunes se confirmó el asesinato de Darío Juárez, candidato a vicealcalde en el municipio de Concordia.

Otro signo del recrudecimiento de la violencia en el contexto electoral fue el homicidio en la aldea El Corilio de Elvir Casaña, candidato del Partido Libertad y Refundación, cuando volvía de participar en una concentración política de la referente del partido y candidata presidencial, Xiomara Castro. La violencia de las últimas semanas no ha distinguido signo político, en tanto el fin de semana pasado también fueron asesinadas con arma blanca dos personas afines al Partido Nacional (oficialismo) en un cierre de campaña.

Lejos de ser hechos aislados, estos sucesos forman parte de un clima de violencia política que ha reportado el Observatorio Nacional de la Violencia de la Universidad Autónoma de Honduras (UNAH). Según la UNAH, del 23 de diciembre del 2020 al 25 de octubre del 2021 se han registrado 64 víctimas de violencia política, de las cuales en el 56,3% de los casos se han utilizado armas de fuego. De acuerdo al informe, los homicidios representan la forma de violencia política más utilizada contra los actores políticos.

El clima ha despertado la preocupación de la comunidad internacional. Desde el Departamento de Estado de los Estados Unidos, el Subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental ha condenado la violencia e instó a los candidatos y partidos políticos a comprometerse con un pacto de no violencia. En la misma línea lo hizo la Organización de Estados Americanos (OEA), que además expresó que “la violencia no tiene cabida en la democracia” y avaló la iniciativa del Consejo Nacional Electoral (CNE) de que los diferentes actores políticos suscriban un acuerdo político para lograr elecciones pacíficas. La Oficina en Honduras del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) también se manifestó al respecto.

La polarización entre la derecha del Partido Nacional y la izquierda del Partido Libre y Refundación a días de las elecciones que elegirán al sucesor de Juan Orlando Hernández parece reflejarse en el aumento de las confrontaciones por motivos políticos. En acusaciones cruzadas, desde el oficialismo el candidato Nasry Asfura, critica a su principal opositora Xiomara Castro por sus vínculos con la Venezuela de Chávez y Maduro y por su propuesta de legalizar el aborto. Mientras tanto, desde el entorno de Castro se califica a Asfura como la continuidad del mandato de Hernández en términos de corrupción y narcotráfico.

Según la Ley Electoral del país centroamericano, las encuestadoras habilitadas ya no pueden publicar estimaciones. Las que se han hecho hasta el momento arrojan resultados dispares, dando como ganador tanto a Asfura como a Castro. Ante la incertidumbre, los candidatos deberán llamar a la moderación de sus simpatizantes para evitar una mayor escalada de violencia mientras se acerca el día de la elección.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Tendencias

Crea una web o blog en WordPress.com