En el marco de la 77° Asamblea General de las Naciones Unidas, el 21 de septiembre el canciller argentino Santiago Cafiero sostuvo una reunión de trabajo con el consejero de Estado y Ministro de Relaciones Exteriores de la República Popular de China, Wang Yi, en la que se planteó concretar el ingreso de la nación sudamericana al bloque BRICS. El encuentro, además, abordó los temas más importantes de la agenda bilateral, a fin de profundizar la Asociación Estratégica Integral entre ambos países, puntualizando la defensa de los intereses del mundo en desarrollo y el sur global en un contexto incierto y de polarización mundial que ponen en jaque al resto de los países.
50° Aniversario de relaciones diplomáticas Argentina-China.
Conmemorando el 50 aniversario de las relaciones diplomáticas, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de Argentina (2022) destacó el “excelente estado de la relación bilateral en el marco del actual ‘Año de la Amistad y la Cooperación entre Argentina y China’”, inaugurado por los presidentes a inicios de este año. Por su parte, Cafiero recalcó la necesidad de diseñar los próximos 50 años de la relación, “no sólo de China con Argentina, sino con América Latina”.
Socios comerciales.
Hoy en día, China es el segundo destino para las exportaciones argentinas. De acuerdo con las herramientas del International Trade Centre (ITC), en 2021 las exportaciones de productos argentinos hacia Beijing alcanzaron un valor de $6,154,212 miles de dólares (USD), representando un crecimiento de 17% respecto al año anterior.
Ilustración 1: Mapa de los mercados importadores de productos exportados

China es el principal proveedor de productos importados por Argentina en 2021, con un valor estimado de $13,525,039 miles de dólares (USD), por lo que para Argentina es prioritario revertir la balanza negativa de la relación comercial con su socio asiático. A este respecto, es preciso señalar que la nación sudamericana se ubica en el lugar 48 de los mercados proveedores de los productos que importa China a nivel mundial, y en el número 46 de los mercados destino de los productos orientales (ITC, 2022).
Los ministros Cafiero y Wang Yi reconocen el potencial que existe entre ambas naciones y de fortalecer la relación al robustecerla en materia financiera, de inversiones y energética, a través de proyectos concretos, acuerdos bilaterales
y acciones conjuntas, como se evidencia en el análisis de Politólogos al Whisky realizado para Escenario Mundial (Vania, P., 2022). En línea con lo sostenido durante el encuentro, el canciller Cafiero agradeció el respaldo del gigante asiático
expresado por el Ministro Wang Yi, al reiterar su apoyo en la inclusión de Argentina al grupo de los BRICS y, sea de paso, respecto a la posición argentina en la cuestión de las Malvinas.
¿Qué es el BRICS?
Con el declive de las economías occidentales, el siglo XXI ha dado la bienvenida a los países emergentes, con las capacidades para rivalizar la hegemonía estadounidense; y su afán por organizarlos en bloques. El más conocido es el denominado BRICS, conjunto que hace referencia a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, aunque en ocasiones se excluya a este último, pudiendo deberse a su debilidad estructural que acabaría por lastrar a los otros cuatro. No obstante, sigue siendo ejemplo para que más economías emergentes participen en este sistema de orden y clasificación por bloques: los MINT, que reúne a México, Indonesia, Nigeria y Turquía; los CIVETS, por Colombia, Indonesia, Vietnam, Egipto, Turquía y Sudáfrica; y los VISTA, integrado por Vietnam, Indonesia, Sudáfrica, Turquía y Argentina.
Debido a la proliferación de potencias emergentes, individuales y colectivas, más recientemente se ha optado por el término EAGLEs (Emerging And Growth-Leading Economies) que no hace referencia a un bloque en específico sino a la
capacidad que se tenga para participar y liderar el crecimiento económico mundial; por lo que las naciones pueden entrar y salir del reporte anual de acuerdo con su desempeño. Teóricamente, con dicha proliferación aumenta el número de jugadores en el escenario mundial, así como las posibilidades de que ocurra una de dos: que compitan entre sí para imponerse por sobre su rival; o que colaboren.
Factores geopolíticos clave para la relación bilateral
Pese a las tendencias actuales llenas de arrebatos y decisiones unilaterales, el mundo – y particularmente América Latina – están dando grandes pasos hacia la integración, donde la conformación de bloques se convierte en un movimiento crucial. Sin embargo, las asimetrías políticas, económicas y geográficas, sin dejar de lado las cuestiones militares, son determinantes para observar hacia donde se inclina la balanza. El caso que está ganando más peso, siendo el más representativo de la década, es China. Por lo que, para Argentina, es evidente la relevancia que adquiere la conformación de un centro de poder regional o en un ámbito determinado. No hay que obviar, no obstante, su posición como asegurada; ni hay que descartar otros candidatos a ostentar el liderazgo regional en América Latina, como Venezuela y México.
Desde la Cancillería de Argentina es preciso apuntalar su potencial hacia una eficiente gestión de sus recursos y relaciones; con planes y políticas bien diseñadas; y salir lo menos ileso de lo inesperado pero previsto. El modelo de la relación bilateral entre Buenos Aires y Beijing es relativamente sencillo: aprovechar las oportunidades y los espacios de América Latina que otros han perdido.

interesante aportacion. si el juego es de bloques, la atencion puesta en solo uno de ellos puede hacer que se pierda la carrera comercial y en el mundo actual por lo que se indica; turquia (enlace entre europa y asia) esta amarrando todos los señalados. Quien en america se acerca a una condicion igual?
Gracias por la atención y la pregunta. Como se procuró plasmar en la nota, la multipolaridad del sistema internacional de nuestros días nos invita a poner atención a diversos bloques que cuentan con tanta capacidad y recursos como para rivalizar con otro Estado o conjunto de estos. De esta manera, desde el continente americano, es importante seguir de cerca a México, Colombia, Chile, Argentina, Brasil y Venezuela, a partir del coqueteo que mantienen con naciones dentro y, especialmente, fuera del continente. De ahí que se considere su organización en bloques como un movimiento crucial, estratégico, pues aislados o actuar de manera unilateral resultaría mucho más costoso en términos económicos, políticos y sociales, así como geopolíticos.