Politólogos al Whisky

Jimena Coronel y Josefina Vigo

Hola, ¿cómo estás? No, en serio… ¿Cómo estás? Porque la Argentina no te da respiro, y como ya sabemos que vivir acá es más cansador que discutir política en un asado familiar, decidimos hacer lo que haría cualquier persona sensata: contar todo con un poco de humor… y soda.

Así nace Sentate que te cuento, tu newsletter quincenal donde te traemos lo más picante de la política nacional, pero sin que te suba la presión. No somos neutrales, tampoco panelistas de TV, solo que creemos que entender lo que pasa es importante, pero reírse un poco; también con un poquito de seriedad, que al final, lo que está pasando en el país no es un chiste. 

Agarrate un mate, porque hoy te traemos cuatro temazos: el fin del cepo, el paro general, la interna peronista, y la vuelta de las retenciones al campo. (porque acá se aburre el que quiere, mis cielos).

Chau cepo, hola incertidumbre

Sí, llegó el día: después de siete años de restricciones, el cepo cambiario se fue. Desde este lunes 14 de abril, el Gobierno arrancó con una nueva etapa económica que permite comprar dólares sin tanto lío (bueno, más o menos). El dólar se mueve en una banda entre $1.000 y $1.400, y el Banco Central dijo: «A partir de ahora, cada uno con su dólar». También se acaba el dólar tarjeta y el dólar blend (porque al Gobierno le gusta sacar cosas, parece).

Además, el acuerdo con el FMI sigue en pie, y ahora hay un plan para fortalecer las reservas (¿será un plan brillante o solo para hacer ruido?). Ah, y sí, si tenías miedo de que el dólar cripto te dejara sin plata, también te contamos qué está pasando ahí. Así que, ya podés respirar tranquilo… por ahora.

¿Te suena esta película? Claro que sí. Ya la vimos cuando Caputo era ministro… bueno, las otras veces que fue ministro.

Paro general: Argentina no se detiene… excepto cuando para

El jueves pasado hubo paro general. Y cuando decimos «general», hablamos en serio: no hubo subtes, no hubo tren, no hubo escuela, y si ibas a trabajar, era casi una misión imposible. La CGT, con apoyo de las CTA y algunos sindicatos, pararon todo porque, claro, la situación está más tensa que los nervios de un hincha de Boca en la última fecha.

¿Qué dijo el Gobierno? Bueno, lo de siempre: «No nos vamos a dejar presionar» y «Hay que mantener la calma». Pero mientras tanto, la calle está que arde y los gremios no aflojan. ¿Es el principio de algo más grande? ¿O solo un parate para hacer ruido? Todavía no lo sabemos, pero si la inflación sigue dando vueltas, el paro va a quedar corto.

Interna peronista: ¿renovación o reciclaje?

Mientras Milei prende fuego todo, el peronismo está ocupado peleándose entre sí, como si no hubiera un caos real al otro lado de la puerta. Esta semana, Cristina volvió a hablar (sí, otra vez) y dejó en claro que sigue pensando que desdoblar las elecciones en la Provincia fue —en sus palabras— un error. Pero a pesar de eso, pidió que los legisladores de su espacio desistan del proyecto para frenar el desdoblamiento. ¿Cómo? Exacto, como cuando Moria te dice «Bueno mamita, hacé lo que se te cante» pero sabés que no es una invitación real.

En su carta, también tiró un par de dardos con su sello personal: recordó que en el famoso plenario del PJ nadie se animó a levantar la mano para bancar la idea del desdoblamiento. Traducción: “yo ya lo dije, ustedes sabrán”. Aun así, apoyó el proyecto del “compañero gobernador”, pero dejando en claro que los tiempos no están para gastar recursos ni energía en cálculos electorales.

Axel, por su parte, sigue intentando sostener su liderazgo provincial mientras le llueven presiones desde todos lados: algunos lo ven como heredero natural, otros como rehén de los fuegos cruzados. Massa reaparece con perfil técnico, otros barajan nombres, y el peronismo, en general, parece más un Zoom sin host que un espacio político con plan.

Y mientras tanto, el país arde: obras frenadas, inflación galopante, caída del consumo, desempleo en alza… pero ellos siguen discutiendo si van a elecciones juntos o separados, como si estuviéramos en una novela de pareja en crisis.
Spoiler: nadie está pensando en los argentinos que la están pasando como el traste.

Campo: “liquiden ahora, que en junio se acaba la promo”

En medio del fin del cepo y la nueva flotación del dólar, Javier Milei le mandó un mensaje clarito al campo: “Avísenle al campo que si tienen que liquidar, liquiden ahora”. ¿La razón? En junio vencen las retenciones reducidas y volverán a subir. Traducción: aprovechen el 2×1 que queda poco.

El Gobierno había bajado temporalmente las retenciones a principios de año para incentivar la liquidación de granos, pero ahora el Presidente confirmó que no habrá prórroga. El mensaje fue claro: liquiden, o después no se quejen.

Desde el sector agropecuario, la reacción no se hizo esperar. Productores y entidades rurales expresaron su malestar por la presión para acelerar la liquidación. Mientras tanto, el Gobierno espera que, sin cepo y con este incentivo, el campo le dé una mano a las reservas, que están más flacas que ticket de supermercado.

En resumen: si sos del campo, estás entre liquidar ahora o jugar al ahorcado en junio, vos elegís. Promo válida hasta agotar la paciencia. Aplican condiciones del FMI. No acumulable con otras crisis.

Nos vemos en quince

Y bueno, hasta acá llegamos hoy. Si llegaste hasta el final, te merecés un aplauso (o un buen mate). Sabemos que la política argentina es una novela, pero la idea de “Sentate que te cuento” es hacerla un poquito más digerible, con humor, pero sin perder de vista lo importante.

Y si con esto quedaste con ganas… no te preocupes que Argentina siempre tiene un plot twist bajo la manga. Nos vemos en 15 días, o antes, si se prende fuego algo o cae un ministro.

¡Hasta la próxima!